Comenzar a correr. Por Roberto Parra

A continuación, vamos a reproducir un artículo escrito por el ex-atleta Roberto Parra, porque considero que todo el mundo que está pensando en empezar a practicar esto del running, lo debería de leer.

Comenzar a correr. Paso a paso. – por Roberto Parra

«Aprende a disfrutar de ti mismo, de tu cuerpo, de tu zancada, de tus pensamientos…»

Cuando alguien que no ha corrido nunca se plantea iniciarse en el running quizá no tenga en cuenta algo básico, lo importante que es empezar a rodar lentamente y obligarse a ir despacio.

A menudo quienes se inician quieren cambios rápidos y en el running hay que ser muy pacientes. De nada sirve plantearse retos demasiado ambiciosos y rodar largas distancias de inicio; es un error garrafal. Lo aconsejable es comenzar a andar y correr, alternando el paso y la carrera, para ir introduciendo más minutos de carrera de forma progresiva.

Un error muy habitual, y que puede hacer que esta práctica tan buena se convierta en un suplicio, es intentar hacer un “plan de entrenamiento” basado en superar el tiempo de carrera cada día, como si éste fuera el objetivo principal. Lógicamente es un objetivo, pero si quieres convertirte en runner debes mirar algo más lejos.

Si hemos de dar un consejo por encima de todos es que el objetivo principal es salir a correr. Pensar en salir a correr es vencer la pereza y ya es un éxito de por sí, con lo cual no habría que plantearse ir mucho más allá al principio.

Cuando después de unos cuantos días, una vez superados las molestias y dolores normales de hacer algo nuevo para nuestro cuerpo, vengan las sensaciones será cuando verdaderamente te enganches. Respirar aire limpio, abrir los pulmones, notar que tienes músculos que creías no tener, las agujetas… son todas buenas muestras de que estamos des-anquilosando el cuerpo y empezando a acostumbrarlo al ejercicio.

Hay que confiar en la respuesta positiva de nuestro cuerpo a esa fase de acondicionamiento, hay que tener en cuenta la capacidad de nuestro organismo para asimilar los cambios. Hay que dar tiempo al cuerpo a que vuelva a ser flexible y que nuestros músculos, tendones, ligamentos… conozcan sus límites y por eso es tan importante ir paso a paso y muy despacio.

 “No seas esclavo del crono. Improvisa y corre por sensaciones”.

No es bueno estar pendiente del cronómetro y mirarlo a cada minuto. No pierdas tiempo en eso al principio. Concéntrate en lo que sientes a cada paso. Estudia tus movimientos para hacerlos más eficaces. Aprovecha esta oportunidad de ser autónomo durante un rato para abrir la mente y pensar en tus cosas. Seguro que notarás que todo fluye mejor que cuanto estás inmerso en tu rutina diaria. Esa será otra de las cosas que harán que salgas cada día a correr. Ya vendrá la lucha contra tu marca personal.

El rodaje es la base del entrenamiento. Hazlo como trámite para lo que unas semanas después podrás plantearte (distintos ritmos y distintas distancias o incluso participar en alguna carrera p.ej). No cometas el error de correr a un ritmo excesivamente elevado. Dosifica y establece un ritmo “umbral” en el que puedas hacer cómoda tu carrera, bien sean 15’ o 40’. Si te pasas solo conocerás sensaciones no muy agradables, y no se trata de eso precisamente.

Cambia de escenario. Cuando ya seas capaz de rodar de treinta minutos en adelante, no debes dejar que la rutina se apodere de ti. Es importante que elijas distintos lugares ya que, si haces cada día lo mismo y pasas por los mismos lugares, tendrás puntos de referencias que, inconscientemente, te hará medirte en esos tiempos parciales y no disfrutarás tanto de la carrera improvisada y por sensaciones.

Hay runners que necesitan correr con la ayuda de música p.ej., o con la “distracción” de la actividad que les rodea. Mi consejo es que aprendas a disfrutar de ti mismo, de tu cuerpo, de tu zancada y de tus pensamientos –que no de tus preocupaciones-.

Relájate y disfruta. Enjoy your day!

Roberto Parra
Ex atleta y Urban Runner

 

Espero que os haya resultado interesante.